El interiorismo comercial juega un papel clave en la experiencia de compra, y el nuevo establecimiento de Ametller Llavaneres, situado en la calle Munt, 12 de Sant Andreu de Llavaneres, es un ejemplo. Un proyecto que combina tradición y modernidad, creando un espacio cálido y acogedor que se integra perfectamente en el casco histórico del municipio.
Diseño y funcionalidad en un espacio con historia
Este proyecto de interiorismo comercial ha supuesto un reto arquitectónico: adaptar una estructura con muros de carga y techos abovedados para conseguir una distribución fluida y funcional. El objetivo ha sido claro: preservar la esencia del espacio, a la vez que se mejora la experiencia de compra con un recorrido cómodo e intuitivo.
Los materiales naturales, la iluminación esmerada y una distribución pensada para resaltar el producto fresco son elementos clave en este diseño. El resultado es una tienda armoniosa, cálida y totalmente adaptada al entorno, que invita a disfrutar de una experiencia de compra cercana y agradable.
Un proyecto que pone en valor el interiorismo comercial
En Ametller Llavaneres, cada detalle ha estado pensado para potenciar el producto y reforzar la identidad de la marca dentro de un espacio único. Este tipo de proyectos demuestran cómo un buen interiorismo comercial puede transformar un establecimiento, haciéndolo más eficiente, atractivo y alineado con las necesidades del cliente.
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